TAOCHI, WUSHI Y ENRAIZAMIENTO
Los siguientes conceptos tienen su origen en la fusión de diferentes culturas orientales como la China, el Budismo, el Taoismo y el Confusionismo. En ellos, se habla a través de imágenes y es prioritario ser coherente y estar en armonía con la naturaleza para lograr longevidad en bienestar a través de herramientas como la medicina con plantas, buena alimentación, el trabajo con la respiración (tuna) y el masaje (tuina).
El Dao yin son una serie de ejercicios tradicionales taoístas, precursores del Qi gong. Se llevan a cabo movimientos con los brazos y el cuerpo mientras se respira de una forma específica. Se realizaban para cultivar el Qi o energía interna del cuerpo. En el Qi Gong Taoista se habla de seres muy longevos o inmortales más que de deidades.
Wushi o Wu Chi (无极) significa “nada”. En la filosofía taoísta el Wushi o vacío primordial es el estado original de todo, el universo no diferenciado donde está la posibilidad de todo. Es la sustancia no manifiesta de la cual surgió todo lo que existe. Wushi representa el principio taoísta en el cual, es el vacío de adentro lo que da significado a la forma. Un ejemplo podría ser una habitación que, aunque es definida por sus cuatro paredes, es el vacío entre ellas lo que le da propósito. Wu shi es representado con un círculo vacío.
Según el modelo Taoista del origen del universo, de Wushi surgieron el Ying y el Yang, principios opuestos pero complementarios. De la interacción de estos, el tai chi, se generan los cinco elementos, que son: tierra, agua, fuego, metal y madera; de estos, wan shi, las 10,000 cosas, todo lo que existe.
PANGU Y BRAHMA: Protagonistas de la creación del universo.
La leyenda de Pangu
En el principio, el universo estaba contenido en un huevo, dentro del cual, las fuerzas vitales del yin (obscura, femenina y fría) y del yang (clara, masculina y caliente) se relacionan una con otra.
Dentro del huevo, Pan Gu (o también Pan Ku), formado a partir de estas fuerzas, estuvo durmiendo durante 18.000 años. Al despertar, se estiró y lo rompió.
Los elementos más pesados del interior del huevo se fueron hacia abajo para formar la tierra y los más ligeros flotaron para formar el cielo.
Entre la tierra y el cielo, estaba Pan Gu.
Todos cada día, durante otros 18.000 años, la tierra y el cielo se separaban un poco más más. Pan Gu crecía la misma proporción por lo que siempre se llenaba el espacio intermedio.
Finalmente, la tierra y el cielo llegaron a sus posiciones defininitvas. Agotado, Pan Gu, se echó a descansar. Y estaba tan agotado que murió. Su cuerpo y sus miembros se convirtieron en motañas. Sus ojos, se transformaron en el sol y la luna. Su carne, la tierra, sus cabellos, los árboles, las plantas, sus lágrimas, ríos y mares. Su aliento, fue el viento, su voz el trueno y el relámpago.
Y por último, las pulgas de Pan Gu, se convirtieron en la humanidad.
El nacimiento de Brahmā.
“El universo estaba envuelto en oscuridad; imperceptible, sin distinciones, incapaz de percibirse, descubrirse o conocerse como si estuviera completamente dormido. El señor creó este universo con los cinco elementos, así como todas las demás cosas fueron manifestándose disipando la oscuridad. Él que está más allá de la percepción de los sentidos, sutil y eterno, que es la esencia de todas las cosas e inconcebible, brilló. Deseando producir varias criaturas de sí mismo, primero creó el agua, y en ella depositó una semilla. Esta se convirtió en un huevo dorado, resplandeciente como el sol, en el que Él mismo nació como Brahmā, el progenitor de todos los mundos. Habiendo surgido de esta causa eterna que contiene lo existente y lo no existente, este hombre es conocido como Brahmā. Él continuó un año en el huevo y sólo con su pensamiento lo dividió en dos. Su cascarón, tan vasto como el monte Meru, estaba hecho de las montañas, y los océanos eran el agua que llenaba su espacio. En ese huevo estaban los continentes, mares y montañas; los planetas y divisiones del universo; los dioses, los demonios y la humanidad. Brahmā ha nacido, es una frase muy usada para expresar su manifestación. Este maravilloso huevo, después de ser habitado por el Creador durante mil años, se abrió de golpe, y Brahmā irradiando luz en meditación comenzó la obra de la creación. Al ver que la tierra estaba hundida bajo las aguas, asumió la forma de un jabalí, y sumergiéndose, la levantó en sus colmillos. Después de esto, continuó la obra de la creación.”
Es importante destacar la diferencia entre Pan Gu, esta deidad que da origen al mundo de acuerdo a esta cosmovisión de origen chino, y Pandu, personaje del Bhagavad Gita padre de los príncipes pandavas: Yudhishthira, Bhima, Arjuna, Nakula y Sahadeva.