POSTURA PARA MEDITAR SENTADO
Al estar sentados estamos erguidos sin la distracción de los objetos del espacio. Esta postura es ideal para dejar de moverse y encontrar la estabilidad que le ayuda a la mente a tener un gran enfoque.
Es importante encontrar una postura cómoda y con la columna neutra para sentarse y poder explorar la expansión de la respiración en el silencio del cuerpo.
Una columna erguida y neutra permite disminuir las distracciones del cuerpo y la mente, favorece el flujo continuo de energía y, entre otras cosas, también reduce presiones y esfuerzos desfavorables para tu respiración, por ejemplo, empujar la espalda media y alta hacia adelante, borrando la cifosis torácica, comprime el espacio de los pulmones por la parte de atrás, si a eso le sumamos la falta de administración abdominal, se generan riesgos en la zona lumbar y distención abdominal, adicionalmente, la carencia de espacio lleva a sostener una respiración abdominal inconsciente con órganos fuera de su cavidad y posiblemente inflamados.
El mantra de Tadasana nos ayuda a redirigir de manera sutil a la respiración, vaciar los órganos, darle un ligero tono al abdomen y relajar el espacio en la parte media y alta del toro para inhalar.

Al colocar la espala alta delante de la espalda baja, los músculos erectores espinales se activan, dándole fuerza a toda la columna y evitando la presión entre las vértebras, y finalmente podemos descarnsar el peso de la cabeza sobre la columna.
La fuerza en la columna proporciona vigor para mantenernos estables en absoluta quietud y equilibro.
Con la estructura de las 3 curvas de columna empezamos a descansar en forma vertical al grado en el que ya no se realiza esfuerzo alguno y podemos solo observar la respiración.
La estabilidad es la base para la exploración de una práctica de respiración confortable, es importante que tu cuerpo no esté dando señales de dolor e incomodidad.
Si el cuerpo colapsa, la postura emite señales hacia el cuerpo que son de fracaso, cansancio y depresión. La mente empieza a replicar las señales que el cuerpo envia, y los síntomas empieza a perturbar a la mente. Con la mente alterada es muy difícil experimentar a la conciencia con nitidez. Por eso es tan importante poder sostener una posutra digna al meditar, para poder meditar en nuestro éxito en lugar de en nuestra depresión.
Uno de los grandes obstáculos para respirar libremente es sentir incomodidad en el cuerpo. Dos de las grandes incomodidades que aparecen en el cuerpo en la postura de meditación son los tobillos y las rodillas.
Normalmente el dolor el tobillos y rodillas en la postura sentada viene por falta de flexibilidad en la pierna o en la cadera, por eso es tan importante incrementar el rango del movimiento del fémur con respecto al hueso iliaco. La cadera, muchas veces se ve restringida o limitada por creencias que hemos tenido por largo tiempo, sin embargo, con el alineamiento y los movimientos anatómicos limpios de una práctica de Hatha Yoga inteligente, se pueden desbloquear del cuerpo y por lo tanto también liberar de nuestro karma.
Al refinar la estructura de la columna al estar sentado podemos aprovechar la postura para experimentar la conciencia y no lo peor de la experiencia humana.