YAMAS

Libro II: Sadhānapāda – La Práctica

Párrafo V-A: Las Virtudes. Los Cinco Yamas

35. ahiṃsāpratiṣṭhāyāṃ tatsaṃnidhau vairatyāgaḥ.

Ahimsa, no violencia, no hay hostilidad en la presencia de aquél que está establecido firme en la no violencia.

La no violencia resulta en la ausencia de hostilidad. Podemos percibir este efecto en personas, que han llegado a cierta comprensión de la vida y ya no tienen hostilidad en su personalidad, por ejemplo, un familiar mayor, su presencia invita a los demás a estar libre de tensión.

36. satyapratiṣṭhāyāṃ kriyāphalāśraytvam.

Satya, honestidad, la obra y resultados del honesto es sustentable.

Cuando la integridad está establecida el fruto de su acción, es sustentable.

Gracias a la práctica de la verdad o congruencia, lo que visualizamos se manifiesta en un resultado muy concreto.

37. asteya pratiṣṭhāyāṃ sarvaratnopasthānam.

Asteya, no robar, la riqueza se le manifiesta a aquel que no roba.

Cuando se establece la abundancia en el individuo, es decir, cuando no roba y no decreta carencia, entonces aparece en su experiencia la riqueza, en todas sus formas.

38. brahmacarya pratiṣṭhāyāṃ vīryalābhaḥ.

Bramhacharia, ahorro, el que contiene gana vigor.

Cuando la maestría en la destreza administrativa se establece el vigor aumenta.

Cuando hay maestría en la administración de nuestros recursos, se procura la contención y moderación, y se evita el despilfarro, por lo tanto, se experimenta el vigor.

 

39. aparigrahasthairye janmakathaṃtāsaṃbodhāḥ.

Aparigraha, desapego, al no avaricioso se le revela la naturaleza de su vida.

Cuando la no aprehensión se establece, se revela el sentido de la propia existencia.

En aquel que se establece en la no aprensión, el no apego, se le revela el sentido de su propia vida.

 

¿Qué es la certificación?